2013. Lecciones inolvidables. Gracias vida.

martes, 31 de diciembre de 2013
Un año más que pasa y que deja sus enseñanzas convertidas en regalos de vida que esta vez han caído de forma tan distinta a otros años, que definitivamente en mi andar y todo lo que he vivido...  Puedo decir que es el año en que más he aprendido de mi, pues descubrí una fuerza diferente, con más conciencia y contundencia.

Indudablemente, fue un año de despedidas, de dejar ir, de aceptación y entender de muchas maneras cuál es mi rol en esta vida, sin cargar con el estigma que nadie, absolutamente nadie pretenda imponerme; un año en que la "libertad" tomó un significado distinto al que siempre le había dado, pues pude descubrir su esencia y sobretodo pude ponerla en práctica. 

No puedo, de ninguna manera dejar de mencionar el mes de Junio. 
Con lo que en ese momento fue el adiós más difícil que en mucho tiempo tuve que enfrentar, pues lastimó profundamente mi alma y mi corazón. 
Con él se iban los sueños, las ilusiones, los deseos; un amor profundo, algo tan especial que hasta el momento no acabo de darle un nombre y que por muchos años fue la guía en mi vida y mi más grande anhelo. Sentimientos que aún me sacan lágrimas y del que en esta ocasión no escribiré más, porque ya no quiero que sea lastimado con las navajas del dolor de nadie.

Luego, este año me regaló lo maravilloso que fue experimentar el equilibrio perfecto. 
Llegó en el momento que tenía que ser y de una forma perfecta, tan definitiva y hermosa que sólo recordarlo me permite retomar nuevamente eso que me dejó y que se ha convertido en mi sostén en los momentos en que decaigo.

Después, más perdidas y desencuentros, dolores más profundos, vidas rotas y retos al corazón. Momentos que pareciendo situaciones devastadoras, porque en realidad lo hicieron, me destrozaron y fueron golpes muy fuertes; sin embargo, me permitieron darme cuenta de las muchas bendiciones que tengo y sobretodo la fortaleza que hay en mi, además de re descubrir mi valor como ser humano, mujer y amiga.

Fui muy feliz por reencontrarme con tantas personas que con sus recuerdos me ayudaron a construirme de nuevo, porque tomaron mi mano y porque me permitieron darme cuenta de mucho de lo que he sembrado durante mi existencia y sobretodo juntos hemos iniciado una cosecha maravillosa de amor, amistad, gratitud, entrega, servicio, compañía, conciencia, fe.

Sigo en lucha diaria por lidiar con mis emociones, pero ahora en una forma distinta. He logrado encontrar luces que había perdido y aunque a veces pareciera que soy "la siempre positiva", la verdad es que no es así; simplemente he aprendido una forma distinta de lidiar con la tristeza que hizo nido en mi.

¡Maravilloso! ... Esa fue la expresión del año. Y la mayor parte de las veces acompañada de la sonrisa y el compartir con el más bonito reencuentro que Dios venía preparando para mi. Plenitud, luz en el alma, vida, reflexiones y una forma bella de enseñar. Gracias por abrir las puertas de tu vida y compartir tanto conmigo. Te quierooooo y Earth, Wind and Fire lo sabe. 

Ansiosa espero el nuevo año. 
Estoy lista para enfrentar lo que venga. He aprendido muchísimo y se lo debo a todas y cada una de las personas que han sido parte de mi. Necesitaba de ellas y con todo mi amor pido a Dios las bendiga. 
Así permanezcan cerca o bien hayan tomado un camino distinto, deseo para ellas felicidad, paz, amor, plenitud, salud y una vida llena de satisfacción y alegrías. 

Tengo una canastilla llena de sueños, listos para verlos materializar el 2014.  
Tengo fe y mucho amor. 
Estoy lista y muy feliz.

Gracias 2013.

2014... ¡Sorpréndemeeee!

Bendecida.

lunes, 9 de diciembre de 2013

Mi vida no sería lo que es sin todas y cada una de las personas que día a día han compartido conmigo y de quienes mucho he aprendido.

Todo tiene un porqué y me siento bendecida con su presencia.
Un segundo o un día, como sea; ya son parte de mi vida y por ello los llevo en mi corazón.

No cambiaría nada, absolutamente nada.

Gracias a todos. Y sobre todo Gracias a Dios.

La silenciosa abandonada.

lunes, 11 de noviembre de 2013
En los fríos pasillos, entre montones de papeles y carátulas de colores, paredes grises y sed de justicia se tejen muchas historias. Algunas, las que ahí se plantean y de fuera buscan solución. Otras, en su interior, historias de amor que inician con una mirada y luego ya forman parte de la vida. Trastornando todo alrededor, con el único deseo de ser feliz, amar y ser amado.

Tres mujeres lloran la partida, la ausencia, el abandono que en un instante se han visto obligadas a vivir.

La primera de ellas, llora con un dolor tan difícil de explicar. Sentada al frente tomando fuerzas de Dios sabe donde.
Lo llevó en sus entrañas. La vida la conoció en su ser, ella fue el recipiente divino, escogido por Dios, para darle forma, para hacerlo humano; para hacerlo hombre. Entre rezos y un llanto indescriptible, trata de despedirlo, de decirle adiós, aunque su partida no la entiende y su vida se va con él.

La segunda de ellas, con largos sollozos,  con la desesperación y la incertidumbre. Una familia que debe continuar, pequeños a los que deberá explicar porqué ya no está papá. Entra y sale, sabía que la separación estaba próxima, pero nunca espero que fuera de esa manera. "Así no", decía. Y de nuevo llora con un nudo en la garganta, sin más palabras, un poco de arrepentimiento y mucha confusión.

La tercera de ellas, la silenciosa abandonada. Pasa desapercibida, con una larga tristeza en el alma. Nadie le da el pésame, nadie la abraza, nadie la consuela. Ahí está ella, con un grito en la garganta y el enorme dolor de su partida que arde y quema la piel. Porque él la llenó de besos y caricias. Porque ella lo cuidó. Mil planes por realizar y promesas... promesas sin cumplir. Tiene la mirada perdida, tal vez en los recuerdos de los momentos compartidos y los sueños que de un tajo tendrá que abandonar. La espera... la espera ahora será infinita.

Y yo, acompáñandolas...
no puedo dejar de llorar.

Je sé que hoy me odias y no quieres ni verme. Pero, por favor promete que el día que yo me vaya estarás ahí conmigo. Promételo!!


Destino. Día 30. (Es pregunta)

miércoles, 2 de octubre de 2013
Algunas cosas están destinadas a no ser.  A no ser la primera ni la segunda vez.  Aunque también estoy cierta que si no son una cosa pueden ser otra.

 
Por supuesto que debe haber aquéllas que simplemente no serán y ese será también su destino.

Hay dentro de mi alma, aún, un hueco profundo. Una interrogante que no me deja en paz.  

Tal vez  porque después de todo la única que sintió  ese llamado fui yo.  Porque sólo  yo supe de la angustia  que me llevó  a investigar,  a preguntar,  a buscar.  Por eso me siento incompleta,  con una pieza faltante.  Como si aquel tesoro que tanto valor tenía para mi, de repente me lo hubieran robado.  Justo cuando lo tenía en mis manos para ayudarle a brillar una vez más. 

No buscaba que brillara para mi.  Quería que brillara para el mundo,  para la vida. 

Pero nadie,  absolutamente nadie sabe cómo es; precisamente porque nadie sabe como fue.  Ni siquiera yo misma acabo de comprender que fue lo que sucedió; Nadie, absolutamente nadie sabe cómo ese llamado vibró  intensamente dentro de mi. 

He aprendido que debo esperar a que pidan mi ayuda.  Antes no servirá  de nada y sólo  aleja  a quienes quiero.

Tengo un oído atento y unos ojos ávidos de responder.  Pero también se ser paciente y sólo  decir...  aquí  estaré por si me necesitas. 

Esta conexión  de sueños y almas sólo yo la tuve. 

Lo demás, no importa cómo o cuantas veces yo lo piense... lo demás está  en manos de Dios. 

Coincidir.

jueves, 19 de septiembre de 2013
"El Maestro aparece, cuando el alumno está preparado".

Creo que nunca imaginé escribir algo así,  pero ahora que mi visión es distinta y he pasado por algunos momentos de grandes enseñanzas, que puedo escribirlo con toda seguridad. 

La vida es increíble. 
En el sinfín de vueltas  que da,  a veces nos pone de nuevo frente a personas que quizá nunca imaginamos volver a ver,  y que aunque hayan sido parte de nuestra historia, parecía no tendrían jamás un papel en la película otra vez.  

Se cierran ciclos y también se abren nuevos. 

Todos, absolutamente todos tenemos algo que enseñar, y;
Todos, tenemos algo que aprender. 

La humildad, será siempre la mejor guia.

Hoy, a ti... 

Gracias por compartir tus experiencias. 
Gracias por ser fuerza e impulso.
Gracias por ser alegría y ejemplo.

Guerras Perdidas-Bacilos



Hoy, la canto con ese mismo sentido que alguna vez le di.

Estás vengado.

La vida se hace o se destroza a cada instante.
La diferencia lo hace la forma en que vamos afrontando lo que se presenta.

Pensé que nunca nadie me podría golpear más fuerte de como lo hiciste tu.
Que equivocada estaba...

Hoy, hay golpes que sin dejar marca me tienen deshecha  una vez más. Me han golpeado quienes menos esperaba y aunque por un momento he vuelto a perderle sentido a la vida; sé que saldré.

Me convertí en esto que tanto odio y que nadie quiere. Ni siquiera yo.

Despedirme no ha sido fácil y menos cuando la vida parecía latir con fuerza.

El camino lo he trazado yo.
El destino sólo Él lo sabe.





A veces se trata de un vaso de agua fresca...

lunes, 2 de septiembre de 2013

A veces se trata de soledades...
A veces se trata de compartir...
A veces se trata de encontrarse

A veces se trata de él...
A veces se trata de mi...
A veces se trata de tocar fondo y luego;

Comenzar a creer una vez más.



Love's Theme - Barry White

sábado, 3 de agosto de 2013


No falla!!!
Jajajajaja Simplemente sensacional!

Me prometí...



Un día me prometí no volver a cantar esta canción, sintiendo cada palabra, no volver a llorarla preguntándome como pudo ser algo que no fue.

Me prometí no volver a arrepentirme por lo que no hice y hacerme esa pregunta una y mil veces. Porque no conocí tristeza más grande que la que ello trae.
No, al menos como mujer.
Como individuo lleno de deseos y sentimientos, como ser de pasiones y anhelos.

No quiero volver a llorar ni preguntarme nada.
He hecho lo que debía, lo que sentía, lo que deseaba.

Resultó, no resultó, no fue? Ya no importa.
Tengo un hoy y voy hacia adelante.

Esta el la última vez.
Porque no tengo que preguntarme nada más. 


Magia y Vida. Verano 2013.

Hay tantas cosas que quisiera escribir: la forma tan maravillosa en que encontré de nuevo la paz y el equilibrio, el diálogo interno y la expresión externa de tantas contradicciones, luchas internas y viejos enojos; nuevos descubrimientos y recuerdos tatuados en cada segundo, en cada milímetro de piel, gota a gota. ... Pero, en realidad creo que será algo que dejaré entre las personas que lo vivimos.

Especialmente el momento en que algo se iluminó en mi, el equilibrio se hizo presente y experimenté uno de los momentos de paz y contemplación más hermosos que haya vivido jamás; que nunca olvidaré y que si bien se trató de algo netamente personal, Dios quiso que alguien más estuviera ahí, justo en ese momento. No sé si lo presenció completamente, sólo sé  estuvo ahí por alguna razón, y que amé su cara preguntando si se trataba de algo mío o podíamos conversar;  y que luego respetuosamente  me dejó seguir viviendo ese maravilloso instante, para después terminar en un mar de emociones mientras mirábamos el sol caer.

Hoy en mi pecho llevo una piedra azul en recuerdo de ese día, de ese maravilloso día, lleno de regalos hermosos y la expresión más bella y divina de amor. No me cansaré de decírtelo, GRACIAS por ser parte de esto que llegó a mi vida sin esperarlo, tal vez deseándolo pero no buscándolo, no ahora, no en este momento y que sigo sin comprender porque has sido tú precisamente el motor y grata compañía en el recorrido y principio de algo que sé será lleno de energía y VIDA.   

Luego, los buenos amigos. 
Gente que guardo en mi corazón con buenos recuerdos, Gente que tiene un lugar en mi historia de vida y Gente con la que hoy tengo la enorme dicha de compartir un instante de vida, recordar viejos tiempos y estrechar lazos de amor y amistad. Me siento realmente bendecida con su presencia y sus atenciones. Se los he dicho de mil maneras, y no me cansaré de ello.
Los Quieroooooooooooooo!!!

Los días azules, no los olvidaré ... que maravilla contemplarlos. Llenarme los ojos de tanto color y sentirlo en todo mi cuerpo. Reír como tontos y disfrutar cada canción. Sí que éramos un grupo de locos muy muy felices!!!

Y en último lugar y no por eso menos importante, me quedó en el corazón la noche maravillosa, acompañada de una de las "Postales del Fin del Mundo". Una noche en la que dejar que la energía se sintiera y explotara segundo a segundo, con viejos reproches, algunos recuerdos, risas, bailes y la luz de la luna; se ha convertido nuevamente en una parte de mi vida.
Un segundo más en la película de nuestras vidas. 
Todo ocurre cuando tiene que suceder.
Gracias por compartir!

Siempre se nos dan oportunidades, y debemos estar preparados para cuando lleguen; porque generalmente será sin avisar. 

Me siento tan llena de luz y paz. 

Las tengo guardadas y la voy dosificando, porque no quiero quedarme otra vez sin nada.
Me siento tranquila, en buen camino, liberada y deseosa de soltar lo que me ata, lo que no me ha permitido ser quien soy y amarme de esa manera.

Aprendí mucho y lo más maravilloso de este aprendizaje es que lo pude compartir con dos personas importantes en mi vida. A las que amo con todo mi corazón. 


Gracias Dios por este largo andar, por cada tropiezo, por las caidas que parecían no tener fin y por el agua fresca en la que después he nadado.


Nuevos retos, miedos vencidos, algunos descubrimientos y mucho mucho más por hacer y por vivir. 
Soy de Agua y ahí es donde me gusta volar!!!!!



Así era la espera...

jueves, 11 de julio de 2013
Una mujer que espera (Fragmento) Poldy Bird
Querido:

Ésta es la carta de una mujer que espera. Y una mujer que espera no se parece mucho a la mujer que es en realidad.



Una mujer que espera tiene miedo.



La desconfianza teje una telaraña sutil que envuelve todos sus pensamientos.
Y así, sus pensamientos se van tornando sombríos, enloquecidos, como una jauría de lobos salvajes que corren y corren dando vueltas en redondo para llegar siempre al mismo lugar. ¿Y sabes lo que es ese lugar?: el borde de un precipicio. Mirando hacia abajo no se ve el fondo, sólo se ve una infinita hondura, un pozo sin fin, sin piso; un abismo que parece atraerla. Hay que tomarse fuertemente de las débiles ramas circundantes para no caer allí.



Alrededor de una mujer que espera, se desdibuja el mundo.



Las dimensiones y las perspectivas se vuelven confusas. Da lo mismo el día que la noche: solamente cuentan las horas que faltan para el momento de la llamada o del encuentro. Tu voz la alegra, pero ella no puede demostrarte en seguida su alegría, porque está tan recubierta por angustias y penas, que sacarla de allí le lleva mucho tiempo. Y cuando ya está a punto de sacarla a la luz, termina la llamada, y en los dos queda una sensación de fracaso, de decepción, de alejamiento.



Una mujer que espera se convierte en aburrimiento. 



Porque siempre repite las mismas palabras: "¿Me extrañás?" "¿Me quieres?" "¿Piensas en mi como yo pienso en ti?" "¿Has visto a alguien?" "¿Has reído?"


Y si has visto a alguien o has reído, que punzada en el alma, qué estiletazo en la mitad del pecho.
Porque no deberías reír, ni tener ganas de nada, ni pronunciar palabras que otros oigan, ni comer, ni beber, ni dormir, ni ir al cine, ni...ni creer que estás vivo.



No sé cómo es la espera de los hombres, qué es lo que sienten los hombres cuando esperan...Pero se me hace que le buscan la vuelta al tiempo para sacarle provecho. Que...hasta se perfuman para ir al trabajo...



Que sus horas se pasan como cualquier hora de los días normales: siguen teniendo sesenta minutos, y cada minuto sesenta segundos, cuando para ella las horas de espera tienen sesenta millones de minutos, todos ellos ocupados por la imagen del aguardado.



Una mujer que espera es la mitad de una mujer.



Es esa mitad que no se pinta, que no tiene ganas de salir, de arreglarse el pelo, de soportar tacos altos, de ir a comprarse ropa...
Es la mitad que no acomoda flores en los floreros de la casa, ni llama a los amigos, ni acepta invitaciones. No presta atención a lo que pasa. Ni a las cosas que dicen los demás. Puede hasta parecer un poco tonta, un poco miope, un poco sorda. A cada rato pregunta ¿qué? ¿Qué decías? Es un robot idéntico a ella, igualito a ella, que actúa manejado por el control remoto de la obligación, la costumbre, los prejuicios, la inercia de un movimiento que se inició en alguna generación anterior.



Oh, solamente tú puedes despertarme de esta hibernación. Sólo con que me dieras tu ternura... Eso.
Tan pequeño e importante. Eso tan poco tenido en cuenta. La ternura.
Que fue lo que me hizo descubrirte entre todos los hombres del mundo.
Que fue lo que hizo que te viese distinto, bello, raro, necesario.



Una mujer que espera es una lágrima.
¡Tiende tu pañuelito de palabras, seca mis ojos, hazme dormir envuelta por tus brazos!
Sólo con que lo digas, con que lo escribas, con que lo sientas, me parece que sería suficiente.
¡Oh, casi todo me parece, a esta hora, suficiente...!



Una mujer que espera... se conforma con poco.

Hoy Renuncio.

jueves, 27 de junio de 2013
De mi buen amigo Carlos.
Tocó mi corazón. Me sigo cuestionando tantas y tantas cosas.

Need to Go Up!

Hoy renuncio a la vida que me han creado, al nombre que me dieron y que nunca escogí, a los conceptos, a los preceptos, a la burda idea de que todo necesita un nombre y un por qué. He vivido en un mundo donde las cosas deben etiquetarse, hay reglas que deben seguirse, horarios a los cuales atenerse, un mundo donde yo tengo que ser mexicano, holandés o francés... lo siento, yo soy el universo, haber nacido en una posición geográfica no define mi escencia. Tener un color determinado de piel y "rasgos distintivos" no me marca ni ayuda a etiquetarme. Guapo, feo, gordo, flaco, alto, bajo... son tonterías que nos indujeron desde siempre, el cuerpo es únicamente una maquinaria, no importa si tu coche luce como carcacha si tiene el motor de un magnífico auto deportivo.

Después de convivir bajo los preceptos, las explicaciones, los horarios, no encuentro en nada de esto un camino que me esté llevando a la felicidad. Dediqué muchos años de mi vida en aprender un álgebra que jamás he utilizado... habiendo tantas maneras de entrenar a la mente. He comido en "mis horarios" aún cuando el cuerpo no lo requiere para seguir una regla social, muchas veces sin satisfacer mi verdadera hambre y sin sentir una necesidad física pero obligado por no perder "la oportunidad" de poder hacerlo.

No puedo decir cómo me llamo, ni cuales son mis gustos, tampoco sé cuál es mi objetivo en este mundo (más allá de ser feliz), he sido tan moldeado desde el día que nací que no recuerdo quién soy yo. Estos pensamientos y sentimientos, estos conocimientos, son sencillamente lo que los demás han nutrido en mi y mis acciones son lo que ellos mismos esperan de mi.

¿En dónde me perdí? Tiene tantos años que no lo recuerdo... sólo me resta vaciar el tanque, formatear mi sistema operativo dejando en un pequeño espacio del back-up aquello que es necesario para seguir conviviendo y sobrellevando este mundo que me fue creado y que ayudé a construir, porque después de todo vivo en un mundo conceptual y material así que necesito encontrar un balance entre mi verdadero yo (cuando lo re-encuentre) y el "yo" que los demás esperan de mi.

El mundo no necesita ser explicado, necesita ser vivido. Ya no requiero nombres y etiquetas, no me conforma estar programado y mi camino a la felicidad lo vivo a cada día, porque la felicidad es el mismo camino, no la meta. ¡La felicidad la estás viviendo ahora! No es algo que llegará o que debo alcanzar, no es una zanahoria que debes perseguir, no es algo material que debes tener... La felicidad eres tú.

Es por eso que hoy renuncio a la vida que me han creado, y comienzo a encontrar quien verdaderamente soy. Lo más increíble de esto es que puedo disfrutar de todas las cosas de la vida como si fueran nuevas, porque son nuevas, apreciar todo en su propia escencia y no desde la manera que aprendiste a conocerlas es tan diferente. Disfruta cada momento, aprécialo, siéntelo, date la oportunidad de conocerlo y no simplemente lo aceptes como te lo enseñaron. Enséñate a vivir, recuérdate y encuéntrate. Nada te hará más feliz.

Ronin Carlos.

Sigo en vuelo...

viernes, 10 de mayo de 2013

Recuerdo la emoción con la que lo escribí.
Recuerdo ese día.
Recuerdo la inspiración y como mi corazón era enorme y  lleno de alegría.

Mis alas están un poco rotas, golpeadas, lastimadas.
Ya no son lo que eran, han cambiado.
En unos extremos mas fuertes, en otros un poco más débiles.

Todo forma parte de este ciclo de la vida. De aprender y de ser.
Desafortunadamente no siempre podemos ir en el mismo camino.
No siempre sentimos igual.

Estás en mi corazón, en mi pensamiento, en mi cuerpo... estás en mi sangre.
No es orgullo, tal vez en temor.

Sigo en vuelo, me mantengo fuerte; sin ser lo que fui, reconociendo lo que soy.

Te amo. Vida de mi vida.